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lunes, 27 de agosto de 2018

40 Pirulos

  En el día de ayer no fue uno más, fue especial, porque el ídolo de Talleres, Pablo Guiñazú cumplió 40 años.

Foto: tn.com.ar
  Fue un regalo de cumpleaños, el triunfo que logró su equipo en La Plata ante Gimnasia, sigue vigente y tiene carretel para rato.

  Un 26 de Agosto de 1978, llegó a éste mundo, un par de meses después que la Selección Nacional, dirigida por César Luis Menotti, se coronaba campeón Mundial de Fútbol por primera vez.

  Nacia, un pequeño hombre al que pusieron Pablo Horacio, el que luego de tantos años, forjó un camino en el Fútbol, que lo ha llevado a ser un gran jugador, referente de los equipos de estuvo y ahora en Talleres.

  La vigencia del "Cholo" se debe a que siempre en la vida, se ha conducido de la mejor manera, no andando por malos caminos, siempre se cuido, para ser el jugador que es ahora, no todos llegan a estar pleno con 40 años, muchos ya se han retirado.

  Es difícil encontrar jugadores de campo con esa edad y que juegue en un puesto, como Volante Central, que tiene que correr, marcar y cuando uno lo ve está intacto, tiene la prestancia de un jugador de 20 años.

  La temporada pasada, cuando eligieron a los mejores de la Superliga, el "Cholo" estaba en ese equipo, como el mejor cinco de la categoría.

Foto: www.clubtalleres.com.ar
  Después de 20 años de haber dejado Córdoba para jugar en tantos equipos del País y del exterior, muchos dudaron que fuera un echo, volver.

  Vino a Talleres, para reforzar un plantel de jerarquía y rápidamente subir a Primera División, por eso el Presidente Andrés Fassi, lo trajo, porque tenía que armar un conjunto con jugadores de experiencia que condujera a los más jóvenes, adentro y afuera de la cancha.

  Luego una grave lesión, fractura de maxilar superior en plena pretemporada, lo hizo rever si iba a seguir jugando al Fútbol, pero decidió a fuerza de voluntad, seguir en la actividad profesional.

  Una persona digna de imitar, con 40 años juega y hace jugar a sus compañeros, derrapa magia en cada encuentro, se para en la mitad del campo de juego, tiene una visión privilegiada, de todo el juego.

  el "Cholo" no se pone límites para decidir cuando va a colgar los botines, ahora su presente es el mejor, con su humildad y carisma. Ojala que haya Pablo Horacio Guiñazú para rato.

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