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miércoles, 8 de abril de 2020

Se Retiro Joven

  Daniel Primo, ese rubio que surgió en el medio campo de Belgrano, no tuvo una dilatada carrera.

Foto: www.belgranocordoba.com
  El oriundo de Porteña con 50 años, estuvo en Sportivo Belgrano de San Francisco como entrenador. 

  Con su cabellera rubia, era un jugador que tenía un panorama completo de la cancha, desde el mediocampo, su estirpe se vio en el Oscar C. Boero, o donde le tocara jugar. 

  A la edad de 20 años se marchó a Belgrano, para jugar, luego ser entrenador y actualmente Coordinador General de Divisiones Inferiores.

  Por una lesión en una de sus rodillas, lo obligó a dejar muy joven el Fútbol, a la edad de 28 años, pero llegó a jugar 116 partidos como profesional, 100 en Belgrano, 1 en San Lorenzo de Almagro y 15 en Argentinos Juniors.

  Comenzó su carrera en Sportivo Belgrano, a la edad de 16 años jugando los Torneos de la Liga Cordobesa y es ese campeonato convirtió algunos goles.

  Su momento cumbre en su carrera, fue el Domingo 27 de Octubre de 1991, en un Talleres - Belgrano. La "T" venía invicto y peleando el campeonato y Belgrano tratando de hacer pie en la categoría Primera División del Fútbol Argentino.

  Se jugaba la novena Fecha, Torneo Apertura de AFA, finalizó 3 a 0 a favor de la "B", con 45.000 personas en el estadio Mario Alberto Kempes, Daniel Primo marcó el segundo, el primero lo hizo el "Tano" Gustavo Spallina y el tercero Roberto Monserrat.

  Con la camiseta de Belgrano, en el Apertura 1993 hizo el gol del empate en tres ante Estudiantes de La Plata, el 19 de Diciembre.

Foto: Mundo D.
  Luego de dejar el Fútbol, empezó a trabajar en la escuelita de Sportivo Belgrano, para ser entrenador comenzando a dirigir en 1999 a Zenón Pereyra en la Primera A de la Liga de Rafaela, después dirigió a El Tala y la "Verde" en el desaparecido Argentino B con 34 años.

   Dentro de la cancha se distinguía por su estirpe, sobresalía en el mediocampo de Belgrano por su cabellera rubia al viento, pero esa maldita rodilla, un día dijo basta y el hombre de Porteña tuvo que abandonar el Fútbol Profesional.

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